El Instituto Italiano de Cultura invita a la exposición: Dos Estrellas Rotas. Obras de Arianna Carossa Pintura, escultura, video.
con la participación extraordinaria de Andrea Balestrero y texto de Irene Biolchini
la inauguración se celebrará el día 20 de septiebre 2018, a las 19:00 Hrs. Entrada libre
La exposición permanecerá abierta hasta el dia 13 de octubre 2018.
Dos estrellas rotas
El trabajo de Arianna Carossa es siempre cambiante, no es posible observarlo fijamente, el ojo no logra acostumbrarse a la forma ni al lenguaje del artista.
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La exposición expuesta en el Instituto Italiano de Cultura es una acumulación de contrastes y técnicas diferentes: pintura, escultura y video. Las esculturas parten de la experiencia de su estadía en México, cuando colocó en el centro de una mina de oro una serie de trabajos en cerámica decorados con oro utilizando la técnica de tercer fuego. A partir de esa primera experiencia nacieron las dos estrellas expuestas en Ceramics Now! (última edición realizada por invitación del Premio Faenza): dos concreciones que el artista creó ensamblando piezas cuneiformes y perturbadoras.
Es precisamente el perturbador freudiano el que puebla las figuras en el centro de las pinturas presentadas en esta exposición: formas con rasgos vagamente orgánicos, cercanas a un imaginario cotidiano y, por lo tanto, aún más aterradoras. Describiendo sus obras y las acumulaciones que las pueblan.
Las acumulaciones de las que estábamos hablando, estas extrañas formas imposibles de descifrar, son el resultado directo del deseo y el impulso, que Freud definió como “una boca que se besa a sí misma”.
Y es precisamente partiendo nuevamente de esta definición freudiana que Lacan -un verdadero y adecuado modelo conceptual y lingüístico del artista- reconstruyendo su teoría de la mirada-objeto, que compara con un “ojo que se mira a sí mismo”.
Para llevar la cuestión a un plano más cercano a nosotros podríamos simplificar diciendo que en la visión de la obra de arte no hay una parte activa (el espectador) y una parte pasiva (la obra), ya que lo que se observa cambia continuamente.
Esto se debe a que cada persona que observa, cuando observa, lo hace de manera diferente, ya que todos estamos vinculados a un cuerpo diferente.
Lo real de Arianna Carossa, lo que regenera el trabajo, se puede definir y medir solo a través de lo siguiente “el ojo que se mira a sí mismo”, esta acción continúa en dos direcciones.